Sexo Vs Vivirse en pareja
21 noviembre, 2019La separación de los padres ¿cómo afrontarlo cuando hay hijos? (II)
18 diciembre, 2019La separación de los padres genera un proceso de duelo tanto para la pareja conyugal como para los hijos (biológicos y de crianza). Por eso es importante que ambos miembros de la pareja puedan acompañarse de un profesional o guía para poder elaborar el proceso de duelo y llevar a cabo una separación con calidad de vida emocional, al servicio del bien-estar propio y familiar.
Considere:
- tomar conciencia que a pesar de la separación conyugal, siempre serán pareja de padres para los hijos.
- evitar tomar de “rehenes emocionales” a los hijos.
- evite que su hijo se convierta en “el mensajero”, lo que le tenga que decir a su expareja: hágalo usted mismo.
- cerrar el ciclo del camino como pareja para poder iniciar el camino de ser pareja de padres para los hijos que tuvieron o adoptaron.
Entre las principales cosas que ambos padres pueden hacer para ayudar a su hijo a atravesar este difícil período, figuran las siguientes:
- mantener los conflictos, riñas y discusiones acaloradas, así como los comentarios sobre los aspectos legales del divorcio al margen de los hijos.
- reducir al mínimo la alteración de las rutinas cotidianas del niño.
- restringir la negatividad contra el otro, así como el resentimiento y la tendencia a echarle la culpa, a las sesiones de terapia y las conversaciones con amigos que se mantengan fuera de casa.
- asegurarse de que ambos padres siguen implicados en la vida del niño.
- a mayoría de adultos que atraviesan un proceso de separación y divorcio necesitan apoyo, de amigos, profesionales de la salud mental, religiosos y parientes. No busque apoyo en su hijo, incluso aunque parezca estar dispuesto a ofrecérselo.
Darle la noticia
En cuanto esté seguro de sus planes, hable con su hijo sobre su decisión de separarse. Aunque no existe una manera fácil de dar la noticia, de ser posible, intente que ambos (usted y el otro progenitor) estén presentes durante la conversación. Es importante dejar a un lado los sentimientos de enfado, culpa o remordimiento. Antes de hablar con su hijo, practique cómo se lo va a decir sin alterarse ni enfadarse durante la conversación.
Aunque la conversación sobre el divorcio debe adaptarse a la edad, grado de madurez y temperamento del niño, asegúrese de trasmitirle a su hijo un mensaje fundamental: lo que ha ocurrido es un asunto entre su madre y su padre y él no es en absoluto culpable de lo ocurrido. La mayoría de los niños se sienten culpables incluso después de que los padres se lo nieguen. Por eso es básico que los padres insistan en esta afirmación para tranquilizar al niño.
Explique a su hijo que a veces la forma de quererse de los adultos experimenta cambios o que usted y su pareja no pueden ponerse de acuerdo en cosas importantes y, por lo tanto, tienen que vivir separados. Pero recuerde que los hijos y los padres están unidos de por vida, sea por nacimiento o por adopción. Los padres y los hijos a menudo están en desacuerdo en un montón de cosas, pero eso forma parte del ciclo de la vida: padres e hijos no dejan de quererse y el vínculo prevalece.
Facilite a su hijo suficiente información a fin de que esté preparado para los cambios que van a tener lugar en su vida. Intente responder a sus preguntas de la forma lo más sincera posible. Recuerde que los hijos no necesitan conocer todos los motivos que hay detrás del divorcio (sobre todo, si eso implica culpar a uno de sus progenitores). Basta con que entiendan qué es lo que va a cambiar en su vida cotidiana e, igual de importante, qué es lo que no va a experimentar cambio alguno.
Si su hijo es muy pequeño, lo mejor es explicárselo todo con palabras sencillas. Podría decirle algo como: «Papá y mamá van a vivir en casas diferentes para que no se peleen tanto, pero los dos te queremos mucho».
Es posible que los niños mayores y los adolescentes sean más conscientes de la situación que están atravesando sus padres y tengan más preguntas basadas en las discusiones y peleas que han escuchado.
Abordar las reacciones del niño
Si, tras recibir la noticia, su hijo está muy alterado, dígale que usted reconoce y acepta sus sentimientos, que le importan y asegúrele que esos sentimientos son perfectamente normales y comprensibles. Puede intentar decirle: «Sé que esto te molesta. ¿Intentamos pensar en algo que te haga sentir mejor?» o «Ambos te queremos mucho y nos sentimos mucho el tener que vivir separados.»
No todos los niños reaccionan de forma inmediata. Haga saber a su hijo que eso también es normal y dígale que habrá otros momentos para hablar sobre el tema cuando él esté preparado. Algunos niños tratan de complacer a sus padres actuando como si no pasara nada o intentan inhibir cualquier sentimiento negativo afirmando que no están enfadados ni tristes por la noticia. A veces, el estrés se manifiesta de otras formas: en los estudios, con los amigos, en los cambios de apetito, en la forma de comportarse o en los patrones de sueño.
Independientemente de que su hijo exprese miedo, preocupación o alivio ante la noticia de la separación y el divorcio, el querrá saber cómo va a cambiar su vida cotidiana a partir de ahora.
Prepárese para contestar estas preguntas y otras similares:
- ¿Con quién voy a vivir?
- ¿Dónde iré al colegio?
- ¿Tendré que cambiar de casa?
- ¿Dónde vivirá cada uno de mis padres?
- ¿Dónde pasaré las vacaciones y los días de fiesta?
- ¿Podré seguir viendo a mis amigos?
- ¿Tendré que cambiar de colegio?
- ¿Podré seguir yendo de campamento este verano?
- ¿Podré seguir practicando mis actividades favoritas?
- ¿Podré visitar a papá, a mamá?
- ¿Puedo tratar a la nueva pareja de papá, de mamá?
- ¿Puedo hablarle a mis nuevos hermanos?
Ser sincero con un hijo no siempre es fácil cuando no se tienen todas las respuestas, o cuando al niño le asusta la situación o se siente culpable de lo que está ocurriendo. Lo más correcto es decirle lo que necesita saber cuándo lo pregunta.
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Espero te sea útil, con afecto, Yraida Moreno Luna.
(CEO Fundador de Psiquexpresión, Psicólogo Clínico, Master en Psicología Aeronáutica, Especialista en varias áreas del quehacer terapéutico: Terapia de Pareja de Pareja, Terapia de Familia, Constelaciones Familiares)